Los patrones de movimiento, la clave para un entrenamiento de fuerza eficaz y equilibrado

20 de diciembre, 2023

Por Martín Beccaria

La fuerza en el tenis es una capacidad condicional muy importante para los jugadores de tenis y para la gran mayoría de los deportes, ya que genera múltiples beneficios, entre ellos ser más rápidos, más potentes y prevenir lesiones. Sin embargo, durante muchos años hubo atletas de alto rendimiento que han entrenado por grupos musculares (basándose en la corriente del físico culturismo) y no por patrones de movimiento.

En primer lugar, debemos entender que los patrones de movimiento justamente son movimientos que incluyen el trabajo de grupos musculares multiarticulares que se combinan en una ejecución, algo muy similar a lo que ocurre en la mayoría de las acciones deportivas y que justamente no sucede trabajando músculos aislados.

Además, vamos a fortalecer grupos musculares en ángulos similares a los que vamos a necesitar dentro de la cancha.

 

 

¿Cuáles son los patrones de movimiento que debemos realizar en una sesión de fuerza?

Debemos aclarar que cada ejercicio tiene una articulación principal que realiza el mayor movimiento y en donde se genera una mayor carga relativa del peso realizado.

 A continuación, dejamos la siguiente clasificación, de todos modos, no es la única y ésta puede adaptarse a las necesidades de cada entrenador y/o entrenado:

  • Tobillo dominante (tradicionalmente conocido como “gemelos” y sus variantes)
  • Rodilla dominante (sentadilla tradicional, sentadilla búlgara, estocadas, etc.)
  • Cadera dominante (peso muerto, puente glúteo, swing, etc)
  • Tracción horizontal (remo con barra, trx y todas sus variantes)
  • Tracción vertical (dominadas, dorsalera y sus variantes en polea)
  • Empuje horizontal (press pecho, flexiones de brazo, pull over, etc)
  • Empuje vertical (press hombros y sus variantes, vuelos laterales, etc.)
  • Rotaciones (con medicine ball o con polea)

Es necesario saber que estos patrones se pueden y se deben entrenar tanto de manera bilateral como también unilateral, los primeros en la búsqueda de valores más altos de fuerza, velocidad, activación neural y por lo tanto de potencia. Mientras que los ejercicios unilaterales van a ser de gran utilidad para los trabajos de estabilidad, de equilibrio y para reducir los desequilibrios musculares entre los miembros dominantes y los no dominantes (fundamental en el tenis que genera grandes desbalances)

Entonces entrenar a través de patrones de movimiento nos puede dar múltiples beneficios como hemos mencionado recientemente, por otro lado, también nos dará un mayor orden a nuestra sesión dentro del gimnasio y será fundamental construir un entrenamiento equilibrado entre los ejercicios seleccionados para la cadena anterior (rodilla dominante y los empujes) como los seleccionados para la cadena posterior (cadera y tobillo dominante y tracciones).

Vale la pena señalar que la mayoría de los tenistas suelen tener más fuerza en la cadena anterior y una tendencia a la debilidad en la cadena posterior (glúteos, isquiosurales, cintura escapular, dorsal ancho etc.), debemos reducir este déficit ya que toda la cadena posterior sufre un gran desgaste en nuestro deporte siendo fundamental en muchas acciones excéntricas (de frenado) como por ejemplo la cintura escapular conteniendo una derecha o los glúteos e isquiosurales en la caída de un saque.

En conclusión, organizar las sesiones según patrones de movimiento no solo es integral para trabajar la fuerza, sino que también trasciende el entrenamiento de músculos aislados. Esta aproximación funcional es altamente beneficiosa para el rendimiento en la cancha de tenis.